Las autoridades de Yapacaní declararon en las últimas horas al municipio como zona de desastre al no poder hacer frente al impacto ocasionado por las lluvias en los últimos días, las cuales trajeron consigo inundaciones y desborde de ríos, que afectaron a diferentes comunidades del área rural.

En las últimas horas, al menos 45 personas, entre ellos mujeres y niños,  fueron evacuadas del sector de Primer Abanico San Juan, distante a 180 km del área urbana de Yapacaní. Entre los rescatados hay cuatro personas que presentaban fiebre y malestar, por los que fueron evacuadas en ambulancia a un centro de salud

Los vecinos se vieron atrapados por el agua desde hace varios días sin poder salir y la desesperación de quedarse sin alimentos los obligó a caminar varios días para pedir ayuda, según explicaron los rescatistas.

«Ellos estaban trabajando cuando los sorprendió el agua y según cuentan los comunarios, estuvieron así por cuatro días, por eso algunos tenían fiebre y dolor de cabeza», explicó Álex Rojas, responsable del grupo de rescate de la Gobernación que llego a Yapacaní para coadyuvar con el rescate de los damnificados.

El responsable de la Unidad de Gestión de Riesgo de la Alcaldía de Yapacaní, José Manuel Fita, informó a EL DEBER que se han realizado varios operativos de rescate, tanto por tierra como en helicóptero. «Estas lluvias han sido las más intensas e históricas de los últimos 20 años y las familias se vieron sorprendidas por el agua», señaló, dando a conocer que Yapacaní todavía se encuentra en alerta naranja por fuertes e intensas precipitaciones.

Los rescatados, una vez revisados por el médico, se marcharon a viviendas de familiares y amigos. Además, toda la faja norte de Yapacaní se inundó por la intensidad de la lluvia y el desborde de pequeños arroyos a causa de las intensas lluvias, según detalló Fita.

El informe técnico para la declaratoria de desastre, emitida por la Unidad de Gestión de Riesgo, indica que la lluvia afectó a 36 comunidades y 1.442 familias. El desborde del río Ichilo afectó a la central norte Ichilo, Central Majusal y el TCO Yuracaré Moxeño. 

El municipio tiene una pérdida de  3.641 hectáreas de cultivos de soya y arroz, 1.775 cabezas de ganado afectadas, 161 cabezas muertas, entre animales menores y aves de corral que se ahogaron o que murieron por falta de alimento, y 990 viviendas anegadas.

Por: El Deber

Por Condori Luis Pedro

Diseñador y Administrador de Noticias en la Web

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