Desde el año 2012, la fotógrafa, pintora y periodista María Daniel Balcázar se dedicó con esmero y pasión a documentar el Carnaval de Oruro, porque vio en esta festividad a toda Bolivia representada en sus bailes, personajes e instrumentos.
Fueron más de 5.000 fotos las que registró en todos estos años y que han sido resumidos en Herederos del alba, libro que hace unos días presentó a través del Museo Nacional de Arte y en el que ha condensado lo que considera el espíritu de la festividad.
“Para mí los herederos del alba son todo los bailarines, los músicos, los artesanos, los bordadores, los creadores de las máscaras, trajes, etc. Son los descendientes de los llamados Seres del Alba, que fueron los pobladores originales de la tierra de los uru-urus, de donde viene el vocablo Oruro”, ha comentado Balcázar, que realizó la selección de las imágenes, bajo la colaboración de su mentor David Alan Harvey, que es miembro de la agencia de fotografía Magnum y fundador de la revista fotográfica Burn. Es gracias a él, dice la fotógrafa, que el tipo de fotos que hace es de mucho detalle.
Es quizás ese afán por el detalle el que hace que las imágenes de Balcázar tengan mayor fuerza documental. No basta con mirarlas una sola vez, al volverlas a mirar siempre se descubre algo nuevo.
1. Taller de mascarero. Herederos de una larga tradición, los ‘careteros’ son también protagonistas del Carnaval.
2. Tinkus. Es una de las danzas más coloridas de la celebración.
3. Danza del Tundiqui. Recrea los sufrimientos de los esclavos traídos de África en la época colonial
5. Banda de Suri Sicuris. Músicos de la danza de origen aimara y de carácter religioso.
6. La Diablada. La coreografía representa la lucha entre el bien y el mal.
8. Baile de los caporales. Una de las danzas más populares.
9. San Miguel Arcángel. Es el personaje central de la danza de la Diablada.