Fiscalía concluye que el hombre se dedicaba a dirigir grupos armados de avasalladores de tierra. Eso no fue considerado una fuente laboral. Aparece un informe policial que confirma la presencia de grupos armados en San Julián, que balearon vehículos

El juez cautelar de Guarayos, Roberto Hurtado, ordenó la detención preventiva por seis meses en la cárcel de Montero en contra de Heber Sixto Canaza Sacaca, que fue identificado como uno de los encapuchados que secuestraron y torturaron a policías, periodistas y trabajadores del campo. El hecho ocurrió el 28 de octubre en la propiedad Las Londras, ubicada en la provincia Guarayos.

Una comisión fiscal integrada por Roberto Ruiz, Iván Quintanilla, Delmy Guzmán y Walter Cisneros imputó a Canaza por los delitos de lesiones graves y leves, robo agravado, privación de libertad, amenazas, tenencia y porte ilícito de armas y tentativa de homicidio.

Dirigía grupos armados

Los fiscales fundamentaron ante el juez que Heber Sixto Canaza se dedica a dirigir grupos de personas armadas con el único fin de ingresar a tierras, que supuestamente no tenían dueños y hacer desalojos violentos.

En la audiencia, los fiscales admitieron que el imputado tiene familia, pero en las investigaciones no se evidenció que ejerza un trabajo lícito. “El día que debía estar en su fuente laboral se encontraba presente en la zona con grupos de personas armadas, situación que no puede considerarse un trabajo”, señala la imputación de los fiscales.

Asimismo, los representantes del Ministerio Público expusieron que Canaza fue reconocido por las víctimas de Las Londras. De acuerdo con los informes, el 22 de octubre la propiedad fue tomada por 70 individuos armados que secuestraron, torturaron e hirieron a cuatro personas.

Por ese hecho, los dueños llegaron el 28 de octubre con policías y periodistas, pero fueron emboscados, secuestrados y torturados.

Tratan de cambiar la realidad

La defensa de Canaza, a través de su abogado César Cardona, aseguró que su cliente es inocente, que no hay pruebas en su contra. Asimismo, señaló que días antes del ataque a los periodistas, los dueños de los predios, que son empresarios, enviaron gente armada para maltratar a los campesinos. Sin embargo, las diligencias de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen y de la Fiscalía establecen que se trata de cambiar la realidad porque no hay evidencia de que empresarios enviaron armas y, más bien, hay cuatro trabajadores heridos con balas durante la ocupación ilegal de tierras del 22 de octubre.

Se ganó una batalla

Roberto Méndez, presidente de la Asociación de Periodistas de Santa Cruz, y la abogada Raquel Guerrero, que defienden a las víctimas, calificaron que con el fallo se ganó una batalla, pero falta ganar la guerra. Méndez pidió que se amplíe el delito de secuestro y terrorismo para liquidar a los grupos armados que siembran el terror impunemente.

La audiencia fue seguida de manera virtual por todas las víctimas con marcada expectativa y sed de justicia. El camarógrafo Percy Suárez, consideró que está empezando a hacerse justicia, pero aún falta mucho camino por recorrer y que no claudicarán jamás.

Informe de grupo armado

Mientras, el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo y el Comando de la Policía de Santa Cruz negaron la existencia de grupos armados, en San Julián personas armadas atacaron a balazos a fiscales y policías cuando acudieron a ejecutar las aprehensiones por el caso Las Londras. Un informe policial oficial establece que hubo violencia, incluso cinco sujetos fuertemente armados hicieron seguimiento a vehículos policiales por Los Troncos; amenazaron, obstruyeron el paso y, al final, se internaron en el monte.

El informe dirigido al director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), Edson Claure, señala que el día 24 de noviembre por la mañana se recibió una llamada telefónica de un coronel pidiendo ayuda, a la altura del cruce a Los Troncos. Señalaba que le dispararon a la llanta del vehículo y que la misma quedó destrozada. Un equipo se trasladó al lugar, logrando observar que la camioneta se encontraba en un llantero. La rueda trasera estaba estropeada.

El informe establece que una vez cambiada la llanta, el contingente de cuatro vehículos avanzó hacia la carretera a Okinawa. A unos cinco kilómetros de Los Troncos, jurisdicción de San Julián, un jefe policial recibió la llamada del subdirector de la Felcc de Santa Cruz, que le indica que eran perseguidos por cinco personas a bordo de dos motocicletas. Estos sujetos portaban armas de fuego, como escopetas y rifles.

“Di la vuelta en mi vehículo y fui al encuentro de estas personas, logrando observar a cinco hombres a bordo de dos motocicletas y portaban armas largas. Estos al vernos detuvieron su marcha e ingresaron al monte, nosotros seguimos nuestra marcha por Okinawa para regresar a Santa Cruz”, señala el informe.

Por: El Deber

Por Juan de Dios Peña Gomez

Gerente Administrador de Taxi-Noticias

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *