El contrabando se ha convertido es una ‘pandemia’ para la economía productiva
El contrabando se ha convertido es una ‘pandemia’ para la economía productiva
Sector fabril de Santa Cruz, advierte que la informalidad y el contrabando están destruyendo industrias y poniendo en riesgo y precarizando el empleo formal de calidad

La realidad productiva y económica de los microempresarios del país desentona con el entusiasmo y las cifras estatales. “Es un cáncer. Traté de competir, pero el contrabando me ganó la guerra. Es difícil ‘pelear’ cuando no hay una política real de fomento a los emprendedores y un mercado invadido de mercadería extranjera internada al país de forma clandestina. Sin mercado, y con los precios y ventas en picada no hay forma de subsistir”, describió Ariel (nombre ficticio), confeccionista, atribuyendo que prefiere no ser identificado por temor a represalias del Gobierno contra quienes hablan en contra de la gestión estatal.

“Ellos (Gobierno) viven en su mundo imaginario. Anuncian créditos y dan cifras irreales. Los préstamos, además de ser burocráticos, tienen condiciones (requisitos y garantías) difíciles de cumplir. En pandemia, muchos talleristas como yo, empeñamos nuestras casas y maquinarias y encima perdimos el capital en la compra de medicamentos. Bajo las condiciones de la banca estatal no hay opción de salir adelante, peor reactivarse. No queda otra opción que recurrir a prestamistas y seguir el camino que muchos compañeros asumieron, tomar las calles y dedicarse al comercio informal vendiendo productos que ingresan de contrabando. Esa es la realidad, lo demás es cuento”, relató Ariel.

Un trabajador de la madera, que también pidió el anonimato, expresó que los bajos precios que registra, sobre todo la oferta brasileña que llega al país vía formal o de contrabando, no solo desplazó y quitó mercado a la producción nacional, de igual modo sacó a muchos de sus ‘colegas’ de la actividad. “Puedo dar fe de que muchos que eran propietarios de pequeñas y medianas carpinterías hoy son importadores mayoristas de muebles. El contrabando fue la detonante. Los que no resistieron a este ‘enemigo’ recurrieron a préstamos y hoy están en las calles vendiendo mercadería de contrabando. En la informalidad encontraron un empleo, no digno, pero a nada. Esto muestra que no hay políticas reales para reactivar a los emprendedores nacionales”, puntualizó.

Desdichadamente, esa es la dura realidad, expresó el presidente de la Federación Departamental de la Micro y Pequeña Empresa (Fedemype) de Santa Cruz, Boris Mendoza. Hizo notar que, si bien hay avances en el tema crediticio, la iniciativa no llega al grueso de los microempresarios, sector que en otro tiempo era intensivo en mano de obra. “El contrabando se ha convertido es una ‘pandemia’ para la economía productiva. Muchos que eran productores, hoy se dedican al comercio (venta de ropa usada), donde no tributan ni tienen costos laborales. Son los nuevos competidores desleales de la industria nacional”, mencionó.

Desde la Federación de Fabriles de Santa Cruz, el secretario ejecutivo Juan Carlos Torrico, indicó que este sector es hoy por hoy el más vulnerable y castigado por los efectos perversos del contrabando, que se refleja en despidos de mano de obra por cierre de líneas de producción y salida de unidades productivas del mercado.

Anotó que muchos de sus ‘compañeros’ recibieron sus finiquitos y para no quedar en la calle se dedican al comercio informal, una actividad que, según él, en estos tiempos deja ‘jugososos’ ingresos. “Sin apoyo a la vista, no tienen otro camino que el de la informalidad y el contrabando. Estas dos variables están destruyendo industrias y poniendo en riesgo y precarizando el empleo formal de calidad”, expresó Torrico, al anotar que el jueves, junto a los afiliados de la Central Obrera Departamental (COD), saldrán a las calles para exigir mayor efectividad en la lucha contra el contrabando y el endurecimiento de las penas para los que incurren en este delito.

Ropavejeros, el nuevo negocio

La semana anterior, con motivo del Día Nacional de los Micro y Pequeños Empresarios de Bolivia, el ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Néstor Huanca, afirmó que desde noviembre de 2020 hasta la fecha el Gobierno implementó medidas para fortalecer al sector de micro y pequeños empresarios (mypes) del país.

Así, refirió que el Gobierno nacional creó el crédito SíBolivia, que cuenta con un fondo Bs 2.393 millones y una tasa de interés fija anual del 0,5%, destinada a la producción con sustitución de importaciones. “A través del crédito del Fideicomiso para la Reactivación y Desarrollo de la Industria Nacional (Firedin) con Sustitución de Importaciones (SíBolivia) hasta el 19 del presente mes se colocaron 9.906 créditos pon un monto total de Bs 1.324 millones, de los cuales el 98% son operaciones de microcrédito con 9.704 préstamos”, precisó el ministro.

Asimismo, Huanca expresó que el Ejecutivo implementó un fondo de garantía de Bs 150 millones para apoyar a los mypes en el acceso a los créditos productivos. Acotó que a través del programa Pro-MyPE se benefició a 1.322 unidades productivas con una inversión de Bs 9,6 millones en capacitación, asistencia técnica y transferencia de activos productivos.

Con respecto a la apertura de mercados, Huanca relievó la implementación de la aplicación móvil Consume lo Nuestro, conocido como billetera móvil, que hasta la fecha generó más de Bs 236 millones de ingresos económicos en beneficio de la producción nacional de micro, pequeños empresarios.

A la par, según el ministro, se desarrollaron más de 127 ferias en apoyo a 6.609 unidades productivas en diferentes entidades para promocionar la aplicación Consume lo Nuestro.

Copan las calles

Desde la Federación de Medianos y Pequeños Empresarios de Potosí (Fedemype), el máximo dirigente Gabriel Mamani, sostuvo que el contrabando no solo perforó los controles en las fronteras, sino que ahora se campea de manera descarada por las calles de Villa Imperial de Potosí.

“Muchos que antes eran confeccionistas han dejado sus talleres y hoy son importadores mayoristas de textiles, sobre todo de industria peruana, y de ropa usada americana que llega al país a bajos precios que quitan mercado y deprimen las ventas de la producción nacional. Los que disponen de menor capital compran un fardo de ropa usada, los hay desde Bs 700, y salen a las calles a vender las prendas. Hoy es un medio de subsistencia común en las calles de Potosí. El desempleo y la falta de políticas de fomento al sector emprendedor hacen que cada día crezca la informalidad”, aseveró Mamani.

A decir del dirigente, la pandemia golpeó la economía productiva y el contrabando está ‘matando’ al sector. “Hablan de fideicomisos, caso del crédito SíBolivia, pero las garantías y los requisitos exigidos son imposibles de cumplir. Exigen casas y maquinaria como garantía, bienes que durante la pandemia fueron castigados por los bancos y los proveedores. Esas cifras que dice el Gobierno son irreales, los reto a darse un paseo por Potosí y verán a cientos de familias en las calles vendiendo ropa usada porque no tienen otra opción”, anotó.

Desde La Paz, su par de la Federación de Medianos y Pequeños Empresarios (Fedemype), Mario Pucho, reconoció que el crédito SíBolivia está abierto y que mínimamente algunos ‘compañeros’ de su sector han accedido.

No obstante, dijo que las condiciones de acceso (ciertas garantías y requisitos) son el cuello de botella para el grueso de los solicitantes. “Mientras no se enmiende este factor es imposible pensar en la reactivación sectorial y económica del país y los puntos callejeros de ropa usada y de venta de productos de contrabando se multiplicarán en las calles y mercados de las ciudades de La Paz y El Alto.

Información oficial de la Aduana detalla que en 2022 se ejecutaron 14.726 operativos de control en todo el país, lográndose comisar mercancía valorada en más de Bs 737 millones, cifras que se esperan superar hasta diciembre de este año. Este año, del 1 de enero al 7 de este mes, se concretaron 2.432 operativos de control en todo el país, incautándose mercancía de contrabando equivalente a Bs 93,8 millones.

Por Juan de Dios Peña Gomez

Gerente Administrador de Taxi-Noticias

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