Cuando el invierno empieza a golpear más fuerte a Argentina, el Gobierno de ese país aprobó un decreto de urgencia que autoriza un crédito público de 200 millones de dólares para la adquisición de mayores volúmenes de gas boliviano.
En ese contexto, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) envía 14 millones de metros cúbicos día (MMm3d), el máximo volumen acordado, aunque durante algunos días de mayo comercializó una cantidad mayor.
Según el decreto del vecino país, el crédito aprobado va a favor de la estatal Integración Energética Argentina S.A. (IEASA) “para la adquisición de gas natural desde el Estado Plurinacional de Bolivia, en el marco del contrato de compraventa de gas natural, suscrito el 19 de octubre de 2006 y sus adendas, por un monto máximo de 200 millones de dólares”.
En este marco, YPFB, desde inicios de mayo, envía el máximo volumen acordado, 14 MMm3d, para el periodo de invierno. Sin embargo, datos de la Gobernación de Santa Cruz reflejan que el envío fue superior a los 17 MMm3d entre el 24 y el 27 de mayo.
En opinión del analista en hidrocarburos José Padilla, cada año la demanda argentina tiene un aumento considerable en época de invierno, pero afirmó que Bolivia no está en condiciones de enviar volúmenes mayores a los 14 MMm3d comprometidos en la quinta adenda al contrato, misma que se firmó a fines de diciembre de 2020.
En analista dijo que el país al no haber concretado nuevos descubrimientos de reservas de gas, tampoco estará en condiciones de incrementar sus ventas a Argentina el próximo año.
Ingresos DE $us 668,2 millones
Los ingresos por exportaciones de gas natural entre enero y abril de 2021 alcanzaron los 668,2 millones de dólares, monto inferior en 10,6 por ciento en comparación a los ingresos obtenidos en similar periodo de 2020, así lo reflejan los datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Solamente en abril, los envíos de gas a Argentina llegaron a un volumen promedio de 14,8 MMm3d, mientras que a Brasil a 18,4 MMm3d.
Actualmente, el precio internacional del barril de petróleo WTI supera los 70 dólares, uno de los registros más elevados en los últimos años. La diferencia es aún más marcada comparada con los precios de 2020.