El cuerpo de la joven fue hallado en estado de descomposición en la habitación de un hostal, donde también se encontraba el acusado
El feminicidio de Valentina Usseglio, de 22 años de edad, es el primero registrado en esta gestión en Cochabamba y consterna a la población.
“Yo a este tipo lo considero un criminal, pero más que un criminal, no sé cómo describirle. Cómo una persona puede tener muerta (a otra) a su lado más de 72 horas. Mi hija ha estado muerta más de 72 horas a su lado y realmente me rompe el corazón”, indicó la madre de Valentina, Grinelda Lara.
La madre de la joven señaló que lo único que pide es justicia y que quedó consternada con los resultados del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF).
El examen forense confirmó que la joven murió por compresión cervical externa y asfixia por estrangulamiento a mano, con una data de la muerte de 72 horas, indica un informe de la Fiscalía.
El pasado 26 de enero, Valentina salió de su domicilio en Tiquipaya rumbo a la ciudad de Cochabamba, cerca de las 13:30 tenía que encontrase con su novio, Randy E.P.
Tras la búsqueda de la familia y la Policía, la noche de este domingo, el cuerpo sin vida de Valentina fue hallado en una habitación de un hostal, donde también se encontraba el acusado quien se autolesionó al verse descubierto.
El acusado fue trasladado al Hospital Viedma, donde se atendió sus lesiones y será dado de alta en dos días.
“Lo único que quiero es justicia por mi hija”, señaló la madre de la joven y relató que su hija sufría violencia por parte del acusado.
“Mi hija me decía constantemente ‘él es muy celoso, posesivo, agarra mi celular, revisa mis mensajes, no quiere que tenga amigos’”, indicó la madre de la joven y señaló que el pasado 16 de diciembre Randy rompió el celular de la joven.
La madre señaló que Valentina había terminado la relación, pero el acusado insistía con continuar.
Este lunes, el abogado de Randy E.P. indicó que su defendido aceptó el crimen y se someterá a un proceso abreviado. La pena máxima por feminicidio en Bolivia es de 30 años de prisión sin derecho a indulto.